Laura Wächter (Algeciras, Cádiz, 11 de junio de 1987) trabaja como ilustradora autónoma de editoriales.

 

Laura estudió bellas artes en la Universidad de Granada, tras realizar un ciclo de ilustración y cursar el bachillerato tecnológico en el IES Monterroso (y terminar en 2005). Más tarde realizó el máster en profesorado. Actualmente es ilustradora autónoma (de editoriales) y previamente fue directora en la empresa Freepik. 

 

Desde un primer momento no tuvo claro estudiar ilustración,estuvo indecisa hasta que terminó el bachillerato. Antes la ilustración no era más que un hobby para ella, y no llegó a plantearse en dedicarse a ello profesionalmente. Todo cambió en 2º de bachillerato, cuando Laura después de terminar el ciclo de ilustración, empieza a notar que tenía ciertas carencias o que no tenía la capacidad para expresar a nivel conceptual ciertas cosas, empieza darle vueltas a hacer la carrera de bellas artes y su decisión efectivamente la ayudó.

 

Por una parte, en el tema del arte, Laura contaba con muchos familiares que dibujaban como hobby, entre ellos: su madre, su abuelo, sus tíos…No obstante, ninguno de ellos se dedicó profesionalmente a esta rama. Su madre quería que ella estudiara arquitectura dadas sus buenas habilidades con el dibujo técnico y las salidas laborales que esta carrera le proporcionaba.

 

 Sin embargo, después de la universidad, realizó el máster de profesorado, por insistencia de su madre que se dedicó toda su vida a la enseñanza.

 

Desde su punto de vista, le gusta la docencia pero la disfruta más cuándo es personalizada, disfrutando mucho cuando es docencia de su especialidad de ilustración. 

 

Por otra parte, tuvo profesores que le influenciaron mucho, sobre todo el bachillerato, cuando se encontraba en la disyuntiva de dedicarse al arte, a la física, o a la filosofía, que la había disfrutado mucho con el profesor Miguel Ángel.

 

En cuanto a la experiencia universitaria, según Laura, tenías que dedicarle mucho tiempo, habiendo días en los que te quedabas en la universidad desde la mañana hasta la tarde.  Laura nunca fue una estudiante modelo, en el sentido de ser muy estudiosa, pero tenía notas un poco dispares en algunas asignaturas y luego se acaba matrículas de honor en otras.

Realmente, le costó ya que el mundo artístico es muy complicado y sobre todo porque tardó bastante tiempo en darse cuenta de cuál era el nicho profesional para el que estaba más preparada o en el que me quería enfocar. Entonces al ver hacia dónde te quieres dirigir, qué camino quieres escoger, ella dio muchos tumbos: intentó ver si se sentía agusto en la industria de la animación diseñando personajes, o incluso antes de empezar la carrera realizó un curso de vestuario teatral, todo esto porque no lo tenía claro. Probándolo fue descubriendo qué era lo que más le gustaba y a lo que se queria dedicar.

 

Además, en su clase había más chicos que chicas (aunque su curso estaba formado por una mezcla del tecnológico, de ciencias puras con letras). Sin embargo, en la universidad había muchas mujeres: en las artes hay muchas mujeres.

 

La ilustración hace a Laura bastante feliz, ya que le mantiene activa mentalmente, al tanto de lo que ocurre en el mundo, le propone retos a menudo (como cada proyecto es diferente, tiene que investigar sobre un tema nuevo y eso le gusta mucho).

 

Si quieres estudiar ilustración, este es el consejo de Laura: 

“No te desanimes y no escuches los consejos: no tiene salida, no vas a poder trabajar… Yo viví eso personalmente, pero si prestas mucha atención en esos comentarios y dejas que te influyan demasiado al final, terminas no andando ningún camino, o por el contraio, andas un camino que descubres que no te gusta, lo que te hace infeliz. Escúchate a ti, no escuches lo que digan los demás. 

A mi me costó en su día entender que si directamente ves que hay una profesión que te gusta mucho y el camino es un ciclo medio o un ciclo de grado superior, no hay obligación de ir a la universidad.”

 

Entre los premios obtenidos por Laura  encontramos “Los Ilystration Awards” (2020),de la asociación de ilustradores de Londres. Y el “Injuve” en 2009.